Dismenorrea

En la antigüedad, la primera menstruación era un evento que significaba la transición de niña a mujer. Se organizaban fiestas presentando a las nuevas "mujeres" que ya estaban en edad de ser pretendidas y con la capacidad de ser madre, el rol más importante asignado por la sociedad a la mujer de antaño.

Hoy, las cosas han cambiado. La menstruación ya no es vista con agrado ni como un evento social. Por el contrario, la mayoría de las adolescentes lo asumen como un evento negativo, asociado a incomodidad y dolor.

Sin duda que uno de los miedos más frecuentes entre las adolescentes y sus madres es el dolor en relación a la menstruación, condición denominada “dismenorrea”.

La dismenorrea puede genera estrés emocional y dificultad para realizar las actividades diarias, situaciones que no pueden ser cuantificadas. Es una importante causa de ausentismo escolar y también laboral. En Estados Unidos se estima que las pérdidas de horas laborales por este motivo son de 600 millones de horas al año y en cifras monetarias es causa de una pérdida de dos millones de dólares anuales

El dolor
“Los estudios señalan que mas del 50% de las mujeres menores de 19 años, presenta dismenorrea. La mayoría de las veces el dolor es leve, sin embargo, hasta un doce por ciento puede ser severo”, explica la Dra. Carrasco.

El 90% de las dismenorreas son primarias, eso quiere decir que no se identifica claramente una enfermedad que provoque el dolor. Habitualmente este se presenta a los pocos meses de la menarquia y se caracteriza por ser un dolor tipo cólico que se presenta días u horas antes del flujo menstrual, desapareciendo poco después del inicio de la menstruación. Se ubica en la región baja del abdomen y puede irradiarse a la cara interna de los muslos, genitales y a espalda. A veces, se puede acompañar de otros síntomas como dolor de cabeza, fatiga, nauseas, vómitos, distensión abdominal, diarrea o estreñimiento configurando el síndrome premenstrual.

Consejos
Habitualmente la dismenorrea es de baja intensidad y bastan algunas medidas sencillas para aliviar el dolor:
Beber bastante agua durante estos días y consumir una dieta rica en fibras, frutas, verduras
Evitar el café, te, bebidas gaseosas y azúcares, no fumar ni beber alcohol
Poner calor local en la parte baja del abdomen
Elevar las piernas al estar sentada o recostada
Darse baños tibios y realizar ejercicio físico moderado
Tomar antiinflamtatorios comunes como ibuprofeno.

Cuándo consultar al ginecólogo

En el doce por ciento de las pacientes el dolor es severo, generando importante alteración en sus actividades diaria. Por lo tanto, frente a esta situación debe acudir a su ginecólogo, ya que en algunas ocasiones es necesario dar otro tipo de medicamentos, incluso anticonceptivos.

“Cuando el médico sospecha que el dolor puede ser causado por alguna enfermedad, lo que se conoce como dismenorrea secundaria, será necesario hacer algunos exámenes de sangre y de imágenes. Afortunadamente ésta situación es poco frecuente”, subraya la Dra. Carrasco.

Otras circunstancias que deben llevar a consultar a un especialista son:

Si a pesar de las medidas anteriores expuestas, el dolor persiste por más de tres meses.
El dolor va en aumento con los ciclos o es de súbito inicio.
Si se acompaña de fiebre y/o flujo genital de mal olor.
Si presenta dolor asociado a atraso menstrual.
Si el dolor no va en relación a la menstruación o continúa más allá de cinco días desde su inicio.

Finalmente, no está de más decir que la menstruación no debería ser un episodio desagradable , pues es una condición natural en las mujeres, es por ello que frente a un dolor que limite el normal desarrollo de sus actividades o que a usted no le parece normal, debe consultar a un especialista, pues es posible aliviar la situación y asi disminuir los efectos negativos fisicos y psico sociales de la dismenorrea.